viernes, junio 02, 2006

Mis ilustraciones a Yola


















El oficio como dibujante
, nos brindan muchas sorpresas y si son gratas con mayor razón. Desde joven, siempre admiré a una bella y encantadora mujer, a una estrella de la televisión infantil: Yola Polastri. Tal vez porque crecí escuchandola y viendola actuar cuando ella interpretaba sus canciones vía canal cuatro, en Lima Perú. Desde luego antes ya había visto al "Tío Jhonny" por el canal cinco. Pero ella, era la primera mujer que veía en esta fasceta de "showman", aunque mejor debería decir "showgirls" si cabe el término. El asunto es que ella era y es peculiar por su forma de ser y digo esto con conocimiento de causa, porque la conozco personalmente. Esas imágenes de verme frente a Yola conversando con ella de muchas cosas, de sus proyectos artísticos, de su familia, de sus amigos, de sus dificultades de salud, de sus vivencias, de sus creencias y su apego por seguir viviendo para alegrar el corazón de los niños, con sus arte; lo tengo muy guardado dentro de mí. Recuerdo cuando Ana Maria Suárez, otra encantadora mujer y extraordinaria colega, con quien realicé algunos trabajos de ilustración (en otro momento les contaré de ella y de su hermoso arte de repujado en canson transparente pintados al pastel para eventos matrimoniales), me pasó el dato que solicitaban unas caricaturas relacionado con Yola Polastri. Me fuí hasta un taller de imprenta ubicado por los alrededores del óvalo de Higuereta y al llegar a aquel lugar y observar un boceto a color del trabajo que tenía que hacer, supuse que necesitaba obtener algunos detalles de la indumentaria que frecuentemente Yola usaba en sus presentaciones artísticas, e inmediatamente me contacté con ella. Al hablarle por teléfono y hacerle ver que yo requería que me mostrase los modelos de la indumentaria que tenía que dibujar y pintar, ella aceptó invitarme a su casa para definir las ilustraciones que le urgía tener cuanto antes para unas tarjetas invitaciones que obsequiaba en sus presentaciones. Una tarde soleada, llegué hasta su residencia ubicada por la Molina. Luego de timbrar y esperar en la puerta (una puerta garage), recorría con mi vista los alrrededores para familiarizarme con el lugar, pues algo me decía que no seria la primera ni la última vez que me encontraría allí. Luego de algunos minutos de espera, se abrió la puerta y la mucama tras el saludo de cortesía, me invitó a pasar. Nos dirigimos por un patio inmenso cubierto de grass y mientras caminábamos hasta llegar a la entrada de la casa, observé a mi lado derecho que se eregía una plataforma donde seguro Yola realizaba sus ensayos previos a una actuación y luego supe que allí daba clases de coreografía, bailes y canto a sus alumnos que contaba entre niños y adolescentes. Al entrar a su casa me topé con una sala de estar y caminando un poco más como bajando dos gradas había un lugar de recepción y allí me puse a esperar mi encuentro con ella. Era un lugar un tanto frío y poco iluminado, en cuyas paredes colgaban sendos cuadros con fotografías de ella en sus presentaciones artísticas, pero algo captó grandemente mi atención. Era una hermosa ilustración, sí un dibujo enmarcado del retrato sonriente de Yola modelando con uno de sus gestos característicos en el escenario. Mientras un televisor inmenso se hallaba prendido pasando algún programa, yo seguía aguardando el momento que ella se aparecería. Hasta que al fin se apareció frente a mí, radiante llena de esplendor, parecía que el tiempo se había detendo con ella, pues lucía igual a como yo la conocía cuando se presentaba en televisión. Refunfuñó un poco con su mucama del por qué me había hecho pasar a una habitación con poca iluminación cuando había otra más iluminada que se encontraba frente a unos grandes ventanales que daban para el escenario que ella tenía del cual les hablé en lineas anteriores (vaya que carácter). Cuando ya estábamos mejor ubicados en su sala de visitas, le manifesté que era necesario tener los modelos de su indumentaria, pues en el boceto no se presentaban los detalles que sí tenían la ropa que ella usaba en sus presentaciones. Se extrañó un poco por mi petición, pero después que hice otros bocetos se dió cuenta por qué era inprescindible copiar los detalles del modelo original. Por ejemplo: En el boceto no estaba el nombre de ella, que en cambio sí figura en toda su extensión en la capa o manto de color amarillo que ella usa. Otro detalle eran las botas que colgaban de ella unas cintas de cuero de multiples colores, era importante saber que se sujetaban con unos broches. Igualmente sucedía lo mismo con la falda y con el chaleco. En la otra ilustración donde Yola está vestida con una indumentaria blue jeans, había que conocer necesariamente los detalles de la falda y de la blusa, que colgaban una especie de tiras semejando a Lily Monster. Las botas, también exigían ser observadas. Al final me sacó sendos modelos de su variada indumentaria que acostumbra usar en sus shows artísticos. Con todos esos elementos, me puse a trabajar en las caricaturas. Ya por la noche me fui a casa a elaborar el trabajo con el cual ya terminado regresaría a mostrarselo para su aprobación, pero eso es materia de comentarlo otro dia. Chau.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

excelente, m encanto la ilustración y la redacción...

Anónimo dijo...

patético